de Clap a Clap y tiro porque me toca...

Definible, en mi modesta opinión, como uno de los mejores, por no decir el mejor, par de días festivos consecutivos del invierno 2006-2007. Analicemos la situación.

Viernes:

Tocamos en el clap. A la gente le gusta. Nos tratan como a curas (veáse fajos gigantescos de consumiciones gratis, así como cajas de todo tipo de bebidas en la salita anexa a la discoteca). Buen rollismo general y espontáneo.

Sábado:

Cumpleaños sorpresa de Edu en las lejanas tierras de Vic. Posterior entrada en el desconocido local que era la discoteca que nos acogería. Privilegios discotequeros de alguien que cumple años (camarera: te invito a tí y a tus amigos...), música adecuada y la amistad hizo el resto.

Domingo:

Nuestro clima cambiante se puso en modo verano ese día, y claro, así no lloras ni queriendo.

Y para acabar, foto clapera :